Mi nombre es Mayka y quiero hablar sobre un tema bastante invisibilizado en nuestra sociedad, la salud mental.

A raíz de la pandemia comencé a ver las cosas de una manera muy distinta a la que las veía antes. Yo siempre he estado bien, he sido fuerte. Pero tras el Covid me empecé a venir un poco abajo.

Los problemas del día a día, los trabajos mal pagados, tener que pagar una vivienda, la subida de precios de la comida, el tener que sacar adelante una familia… todo comenzaba a absorberme mentalmente. Llegas a meterte en un pozo del que no encuentras salida.

He acudido a mi médico de cabecera para contarle mi caso y la única respuesta que recibo es que hay una larguísima lista de espera para acceder al psicólogo de la Seguridad Social. La única solución que recibo por parte de mi médico son pastillas para dormir. Pero ¿para qué? Yo necesito otra solución, eso no me saca de dónde estoy.

Además de acudir a mi médico, he ido a más sitios como a la asistente social, para preguntar y buscar alguna solución. Las listas de espera muchas veces empujan a los pacientes con algún problema de salud mental a acudir al sistema privado, pero no todos los ciudadanos nos podemos permitir un psicólogo privado.

Los médicos no deben limitarse a recetar pastillas para dormir, necesitamos otro tipo de ayuda. En nuestro país el número de psicólogos no llega a 6 por cada 100.000 habitantes, cuando lo recomendado por la Unión Europea es de 18.

Esto es uno de los mayores problemas en nuestra sociedad, pero no sale en los medios de comunicación. Debemos concienciarnos y dar visibilidad a un problema que afecta a muchas personas, ya que 4 de cada 10 españoles no gozan de una buena salud mental.

Me gustaría reivindicar una mejor accesibilidad a los psicólogos de la Seguridad Social. Se necesitan más especialistas en salud mental, mejor facilidad para acceder a ellos y que esas interminables listas de espera desaparezcan.

Por otro lado, los problemas de salud mental parecen seguir siendo un tema tabú en nuestra sociedad. Pero si alguien sabe que tiene a una persona cercana pasando por un momento complicado, debería estar más encima e intentar ayudarla. Parece que en los últimos tiempos cada uno va a lo suyo y nos olvidamos de los demás.

Por todo esto lanzo esta campaña dirigida al Congreso de los Diputados, para pedir una mayor inversión en salud mental, mejor accesibilidad a los psicólogos de la Seguridad Social y más ayudas.