Soy Mónica y estoy luchando contra un cáncer de mama.  
 

Gracias al diagnóstico del cáncer, mi vida ha cambiado muchísimo. Aunque los tratamientos para poder curar el cáncer son duros, son tratamientos que me proporcionan mucha confianza en que me curaré ya que están realizados a mi medida.  
 

Si tuviera que elegir qué tipo de cáncer tener, elegiría el que me ha tocado. Es uno de los cánceres más investigados y con tratamientos más avanzados. Además, es un cáncer muy visibilizado en la sociedad. Yo, al igual que muchas de las mujeres que pasamos por esta experiencia, llenamos las redes sociales hablando sobre ello y apoyándonos unas a las otras.  
 

Pero hay muchos otros tipos de cáncer que no están investigados, que no tienen cura y que ni siquiera tienen tratamiento. El ejemplo más cercano a mi fue por parte de un primo mío que pasó por un melanoma muy agresivo, era el único caso que se conocía en el hospital. No pudieron hacer nada por él, solo intentar calmar su dolor.  
 

Los médicos y todo el personal del hospital que me tratan son increíbles y les agradezco todo lo que están haciendo por mi. Sé que a ese mismo personal le dolió muchísimo no poder hacer nada por mi primo, que se sintieron impotentes, y estoy segura de que también se sienten impotentes frente a otros cánceres que tienen pocos o ningún tratamiento disponible.  
 

Esto sucede porque hay una gran falta de investigación. No hay investigación en parte porque no se visibiliza y se sensibiliza a la población sobre estas enfermedades para que la ciudadanía pida a los políticos más recursos.  
 

Por eso, desde mi situación privilegiada de paciente con un tipo de cáncer al que se destinan muchos recursos, pido a los políticos del Parlament de Catalunya que se impliquen, que inviertan mas recursos en nuevas investigaciones sobre diferentes tipos de cáncer menos conocidos, pero que afectan a muchas personas.