Mi nombre es Natacha y he atravesado por un cáncer de mama, soy argentina pero llevo más de quince años en España. 

Trabajando de camarera me di un golpe en el pecho con la barra del bar. Al momento no sentí nada, pero a los tres meses me salió un bulto. Llamé al médico y me mandó directamente una mamografía. También me hicieron una ecografía pero como no estaban muy seguros de si el bulto era maligno optaron por hacer una biopsia.  

En diciembre me dieron el diagnóstico: cáncer de mama con metástasis en la axila. En enero comencé la quimio. El proceso es muy duro porque tu cuerpo cambia totalmente. Además, cuando escuchas la palabra cáncer lo primero que piensas es que te vas a morir. 

Yo tengo un hijo de 16 años y fue un golpe para ambos. Los primeros meses fueron los más difíciles. Estuve cuatro meses con quimios rojas y ahora estoy con sesiones de quimio blanca, voy por la 5 de las 12 que tengo que hacer. 

Yo tenía un tumor muy grande, de 16 centímetros, y por eso no se pudo operar desde el principio. Ahora mismo se ha reducido a la mitad. En julio, cuando acabe con la quimio, me operaran. Tras la operación también tendré que hacer quimio preventiva.  

Creo que es fundamental que se inviertan más recursos en la investigación de todo tipo de cánceres, pero en especial del metastásico que es el más olvidado. También pienso que se deberían ofrecer ayudas a los pacientes oncológicos. Yo antes de todo esto trabajaba, pero al mes de empezar la quimio me tuve que dar de baja porque tu cuerpo no puede aguantar. Además en mi caso, por ejemplo, tras los tratamientos se me duerme el brazo derecho. Aunque quiera trabajar no puedo. 

En enero me di de baja laboral, pero mi contrato terminaba a finales de febrero y mi jefe me echó. Así que me quedé sin ingresos. Como sigo de baja no puedo pedir ayudas, ni cobrar el paro. Hasta que no me cure y me den el alta esta situación burocrática no va a cambiar. 

Otra cosa que me gustaría reivindicar es que en las revisiones ginecológicas no se palpan los pechos a las pacientes. Es fundamental que esto se haga para poder hacer detecciones precoces. En mi caso, igual podría haber ayudado a que me lo detectaron antes, ya que yo iba todos los años a mi revisión. Además, creo que se debería empezar a hacer ecografías antes. Yo tengo 38 años y cada vez es más común el cáncer de mama en pacientes jóvenes. 

Me gustaría que el Parlamento de Andalucía se hiciera eco de estas peticiones y se pusiera las pilas con estos asuntos.