Hola. Somos un grupo de ciudadanos y ciudadanas afectados que hemos sido capaces de unirnos y poner en marcha la PLATAFORMA AFECTADOS RESTRICCIONES CIRCULATORIAS. Somos propietarios de los vehículos mal llamados «más contaminantes».

La plataforma se creó en marzo del 2017 en Barcelona, ciudad con voluntad de alcanzar todo el territorio de Cataluña y después de su evolución y en base a la misma pasó a ser asociación en noviembre de 2017, con idéntico ámbito de actuación. Actualmente colabora también con personas de otras ciudades de España.

Desde Madrid nos contactaron, y animamos para que hicieran su propia asociación, de ahí surge Avarm. Queríamos que en todas las provincias hubiera una cabeza visible que liderara el movimiento y fuera el apoyo necesario para todas las personas afectadas. 

Todos los integrantes somos conscientes de que debemos esforzarnos para tener una mejor calidad del aire. Tenemos consciencia de que los seres humanos vertemos contaminantes al aire que no son naturales, y seríamos tontos si no quisiéramos una mejor calidad de vida. 

A pesar de eso, a nivel europeo se han establecido unos valores para reducir el nivel de contaminación que no debería comenzar por nuestros vehículos. Hay, por ejemplo, actividad aeroportuaria que afecta muchísimo más a la calidad del aire. 

Debe haber un movimiento que intente reducir la contaminación del aire a través de la mejora en transporte público, incentivar que ese transporte público sea el preferido de la gente, vehículos menos contaminantes, utilizar filtros, cambiar motores por otros más eficientes, etc. 

Tenemos que aprender de otras ciudades europeas, donde las administraciones han hecho que sus ciudadanos hagan un cambio progresivo, pero no se le ha prohibido a nadie la circulación en sí. Se han dado facilidades. 

Aquí, en España, se ha tomado el camino rápido porque iban tarde con respecto a la contaminación. Han querido hacer ver, de cara a Europa, que estaban ‘haciendo algo’. Se han empezado a clasificar medioambientalmente los vehículos, se han sacado unas etiquetas por norma euro y por año del propio vehículo, etc. 

Nosotros, los ciudadanos españoles, queremos tener los mismos beneficios que se tienen en el resto de Europa. Queremos que se invierta en transporte público, queremos que la administración sea la primera que se ponga las pilas.

Por todo lo plasmado, lanzamos la siguiente petición al Congreso de los Diputados para que haya una regulación de los vehículos contaminantes que no afecte a la ciudadanía, puesto que no son los verdaderos causantes de la destrucción ecológica. 

Nos gustaría que se aplicaran las reglas de la ecología, reparación y reciclaje. Parece que nuestros enemigos son los coches y que los conductores somos los culpables de todas las enfermedades existentes, cuando no es así. 

Los mismos valores que antes eran ‘normales’, ahora son malísimos. Es más, se ha puesto en marcha la creación de un filtro para los automóviles que elimina todos los elementos contaminantes. ¿Por qué no se fabrica y se distribuye entre la ciudadanía? Quizás es porque no interesa debido al consumo. 

Nadie se puede imaginar la ‘mierda’ que sueltan los barcos que salen desde los diferentes puertos españoles. Estos no tienen regulación medioambiental y deberían empezar por ahí. 

Si queremos regular la contaminación global, hagámoslo, pero no con medidas ridículas que solo afectan al día a día del ciudadano.