Nuestras prioridades actuales son la generación de empleo, resolver las necesidades básicas de las personas, y establecer un sistema honrado de regeneración democrática.

Para el Partido Socialista no existe un problema de sueldos; existe un problema de corrupción generalizada, de contratos de asistencias técnicas elevadas, de modificaciones constantes de contratos ya firmados y de nefasta gestión de control en la Administración Pública Regional.

Una Administración Pública controlada evitaría muchos despilfarros inútiles y obtendríamos los recursos necesarios para afrontar muchas de las necesidades que las personas de la Región de Murcia tienen en estos momentos.