En España tenemos una Constitución vigente que fue aprobada por el pueblo muy mayoritariamente y que recoge como forma política del estado la monarquía. En una democracia, se cumplen las leyes. En consecuencia, si el rey abdica debe subir al trono su sucesor siguiendo las reglas fijdas en esa Constitución. En esa misma norma está prevista la posibilidad de su reforma. En el caso de querer establecer una república, hay que modificar el Titulo II, al menos.  Para ello, primero las Cortes deben por mayoría de 2/3 de cada Cámara apoyarlo, luego hay que discolver esas Cortes y elegir unas nuevas que deberán modificar la redacción constitucional y, tras ello, esa reforma se someterá a referéndum. Ese es el camino que se debe seguir. Por tanto, a mi jucio hacer un referéndum previo al previsto en el proceso de reforma constitucional, que sería de dudosa constitucionalidad, sería una profunda irresponsabilidad, ya que carecería de consecuencia alguna más allá de perder el tiempo en debates estériles y caricaturescos. A no ser que lo que se pretenda es cambiar la forma política sin respetar la Constitución, pero claro eso antidemocratico y estaríamos ante otra cosa. En definitiva, si se quiere cambiar de forma de estado, habrá que hacerlo en el marco de una reforma constitucional. Ahí se podrá discutir todo y el que quiera podrá intentar conseguir las mayorías necesarias para ello. No hay atajos.