El derecho a la paga extraordinaria no es incompatible con la necesaria subida salarial.
Buenas tardes David, sin perjuicio del origen de la medida estimo que el concepto de paga extraordinaria actualmente es un derecho retributivo de los trabajadores garantizado en el Estatuto de los Trabajadores y que además está incorporado a nuestros usos y costumbres con un amplio arraigo; la propia legislación en su regulación actual pone de relieve la importancia de este concepto, tanto es así que incluso por Convenio Colectivo se puede regular una tercera paga y solo por Convenio Colectivo se puede decidir su prorrateo pues nuestro Estatuto no permite el salario global. Así mismo nuestra jurisprudencia reciente estima que en aquellos casos en que el empresario prorratea el abono de las pagas extras, en contra de lo establecido en el Convenio Colectivo sigue adeudando a los trabajadores su abono y así se ha pronunciado el TS en unificación de doctrina, blindando en cierta forma el abono en dos mensualidades independientes del salario. Quiero con este referencia a su configuración legal y jurisprudencial ponerte de relieve que nuestro ordenamiento y en la interpretación que hacen los jueces existe una defensa importante de este derecho salarial, no dejando su regulación a la capacidad negociadora de las partes.
Entiendo que puede haber opiniones en contra, en el sentido de que lo que hace el abono de 14 pagas es limitar la liquidez mensual de los trabajadores, pero creo que los momentos actuales de precarización de las relaciones laborales y bajos salarios no es un momento adecuado para plantear la supresión de este concepto salarial, pues todos conocemos situaciones que aún existiendo el concepto el empresario distribuye sin más el salario ofrecido al trabajador entre 14 pagas y otros supuestos en que se prorratea el salario, para crear una apariencia de "mayor cuantia" en supuestos de salarios bajos, con los que apenas se puede subsistir.
Estimo que en los últimos años ya se han eliminado demasiados derechos a los trabajadores, sin necesidad de tener que amparar una subida salarial en la desaparición de un concepto que es tan bien valorado por los mismos.
Coincido plenamente contigo en la necesidad de subir los salarios, incrementando el SMI y recuperando la negociación colectiva y en la necesidad de que a los trabajadores se les abonan las horas realmente trabajadas, todas estas cuestiones por las que lucharemos los socialistas y creo que estamos en un momento de blindar derechos no de eliminar.
En relación al abono de la paga extra a los pensionistas y la interesada vinculación por parte del gobierno en funciones de este concepto con la dilapidación que ha hecho el Partido Popular de la caja de la Seguridad social, estimó que no debemos dejarnos llevar al debate de esta manera, pues es lo que pretenden; del mal uso de la caja no tienen la culpa los pensionistas, sino las políticas del partido popular, pues todas las medidas que se han adoptado han llevado a que los trabajadores perciban salarios bajos y a que los empresarios coticen cada vez menos, por poner ejemplos, la pérdida de capacidad negociadora de los convenios colectivos, la generalización de los contratos a tiempo parcial, la generalización de modalidades contractuales de cotización cero como los contratos formativos, las medidas de fomento de empleo "peso muerto" a base de exenciones, bonificaciones y mínimos exentos, han llevado a una situación difícil de las cuentas de la seguridad social y ello sin que se haya realizado un diagnóstico serio sobre el futuro de las pensiones y la necesidad de recuperar el Pacto de Toledo y a estudiar nuevas fórmulas de financiación.
En definitiva estimado David creo que es momento de cómo tú dices garantizar salarios dignos, salarios acordes con las horas que se trabaja y momento de mantener aquellos derechos que tienen los trabajadores reconocidos por nuestra legislación y garantizados por nuestros tribunales. Así como el momento de volver a recuperar las cotizaciones a la seguridad social y abrir un debate serio sobre la financiación de las pensiones, pilar básico del Estado del bienestar y con un efecto esencial de redistribución de la riqueza.
Partekatu
La "paga extra" se introdujo a principios de la dictadura franquista en España. El Gobierno del general Franco, en vez de establecer sueldos dignos por ley, gratificó a los trabajadores con una cantidad extraordinaria de salario. Personalmente, creo que esta costumbre debería ser erradicada y sustituída por unos salarios más dignos, elevando la cuantía del salario mínimo y pensiones mínimas. Además, recientemente nos hemos enterado de que se está dilapidando la "hucha" de las pensiones en pagar "la extra" a los pensionistas y su pago supone un sobrecoste importante para todos y todas a la hora de retribuir a los empleados públicos.
Batu zaitez Osoigora