Pregunta para Parlamento de Catalunya
Tras vencer al cáncer, mi hija convive con múltiples secuelas. ¿Cuándo se van a destinar más recursos a la investigación del cáncer infantil y a paliar las huellas que dejan los tratamientos?
Me llamo Rosa María y, tras superar una leucemia, mi hija Queralt no recibe ningún tipo de acompañamiento psicológico, ni apoyo económico, educativo y rehabilitador.
En un viaje a Bolivia, Queralt, que entonces tenía poco más de un año, empezó a tener convulsiones y fiebres muy altas. La llevamos al hospital y en los resultados de una analítica vieron que tenía muy pocos glóbulos rojos. No le realizaron ninguna prueba más y nos dijeron que probablemente tuviese dengue.
Cuando regresamos a España, además de continuar con fiebre, mi hija dejó de comer y perdió mucho peso. La llevamos a Urgencias y nos derivaron al hospital Sant Joan de Deu, donde finalmente le diagnosticaron una leucemia linfoblástica aguda.
Estuvo recibiendo quimioterapia durante dos años, pero al poco tiempo de finalizarla tuvo una recaída. La enfermedad había regresado con más fuerza y Queralt se había hecho inmune a los fármacos que le habían administrado. Decidieron meterla en un ensayo clínico que hizo que la enfermedad disminuyese, pero no consiguió eliminarla.
A continuación la sometieron a radioterapia y le realizaron un trasplante de médula, pero a los nueve meses volvió a recaer. Esta vez la leucemia ya era mucho más agresiva y le llegaron a poner una quimioterapia específica, pero tampoco funcionó.
Entramos en un segundo ensayo clínico (inmunoterapia CAR-T), que afortunadamente consiguió eliminar lo que ninguna quimioterapia pudo, y por último le hicieron un segundo trasplante.
A día de hoy, aunque todavía no le han dado la remisión completa, Queralt está curada. En cambio, el haber estado recibiendo tratamientos tan agresivos desde que nació, le ha dejado grandes secuelas. Además, a lo largo del proceso, he encontrado muchas carencias a nivel de conciliación, pues cuando un niño pasa por una enfermedad como esta, sus padres necesitan pasar prácticamente la totalidad del tiempo con él.
Por ello, con esta iniciativa pido al Parlamento de Catalunya que destine más recursos a la investigación del cáncer infantil, a las ayudas que los pacientes que han atravesado esta enfermedad necesitan para paliar sus secuelas y aumentar su calidad de vida; y a mejorar la conciliación laboral y familiar.