Me llamo Sandra, y llevo trabajando en la agricultura ecológica desde hace cuatro años. Deje mi trabajo y mi residencia en la gran ciudad para comenzar este gran proyecto, un modelo de agricultura sostenible (Vistalegre), desde la convicción de que era necesario para la cohabitación de la sociedad y el planeta. 

Es decir, la tierra no aguanta el ritmo de producción y de consumo que llevamos. Y quería aportar mi granito de arena rehabilitando un trozo de terreno que estaba abandonado, adaptarlo al cultivo ecológico, y que desde el respeto hacia el medio ambiente, se pudiese fomentar una economía circular con productos de temporada y proximidad.

Y así, cada día, cada hora y en cada minuto, lo estamos consiguiendo, pero también con mucha frustración por la burocracia repleta de trabas e impedimentos que nos imponen desde el Ayuntamiento, Cabildo, Gobierno, o Europa. Esos que no saben lo duro que hay que trabajar para llevar a cabo una agricultura sostenible con el medioambiente, sin sufrir grandes pérdidas económicas porque no se abaratan los costes de producción, ni estar mirando constantemente el tiempo. 

Es por ello que lanzo esta petición en suma a las reivindicaciones que están realizando las organizaciones agrarias, para pedir cambios en las políticas de la Unión Europea, un plan de choque del Gobierno español y actuaciones de las comunidades autónomas frente a la asfixiante burocracia, y los problemas de sequía que están acabando con la sostenibilidad del campo. 

Respecto a la burocracia, tenemos claro que quienes han redactado las condiciones para la prestación de subvenciones no han trabajado en su vida en el campo. El leguaje que utilizan es farragoso, los objetivos que se marcan para su obtención no tienen en cuentas las condiciones climáticas que estamos viviendo actualmente, y cuando crees tenerlo todo en regla, nadie te asegura el recibir la subvención porque las administraciones públicas parecen mirar más para sancionarte que para orientarte y ayudarte en la renovación de papeles, que de no saberlo, también te pueden llegar a penalizar, y claramente, la culpa siempre será tuya. 

En cuanto al problema con el agua, no es ninguna novedad las numerosas dificultades que estamos teniendo con el riego por una cuestión climática, pero también nuevamente por culpa de la administración, que nos hace pagar un mínimo de consumo se gaste o no, y cuando presentamos una propuesta para poner una solución al embalse de agua proveniente de la lluvia, la administración únicamente ofrece impedimentos.

En definitiva, la agricultura está cansada de encontrar solo dificultades a su labor. Si se ofrecen una serie de ayudas para facilitar un modelo de sostenibilidad, que sean de verdad. No puede ser que luchemos por cumplir numerosos requisitos, que adelantemos dinero de nuestra propia economía, que tengamos iniciativas aprobadas por parte de Europa, y cuando las llevamos a cabo sea la propia administración local quien nos la deniegue sin la oportunidad de reclamar. 

Para las instituciones, hacerse la foto fomentando la agricultura ecológica queda muy bonito. Pero a la hora de la verdad, el interés por ayudarnos desaparece y se busca más el cómo penalizar. 

Así, nos vemos obligados a pelear con `políticas cínicas´ que no tienen en cuenta las grandes posibilidades que ofrece la agricultura ecológica. Es una pena que ese amor que ponemos en la tierra, en cada semilla que plantamos y que vemos crecer con orgullo, quede empañado por la presión que ejerce la administración en labor que realizamos. Por eso necesitamos urgentemente, que como agricultores, se centren en considerar nuestras reivindicaciones: 

• Mayores facilidades burocráticas
• Medidas para combatir la sequia

Queremos poder ofrecer productos de calidad un precio justo. Por la sostenibilidad del planeta y por el futuro de la agricultura, ¿nos ayudas a ser escuchados apoyando y difundiendo esta petición?