Con mayor o menor éxito, estados los hay de los tamaños y condiciones.

En el corto y medio plazo, una hipotética Catalunya independiente sería inviable, por las repercusiones económicas que tendría para financiarse, más teniendo en cuenta las actuales circunstacias de crisis y deuda.

También habrían importantes repercusiones en las relaciones comerciales, fruto del efecto frontera y de la salida de la Unión Europea.

No me parece oportuno que ante la incierta expectativa de un futuro feliz, se condenen dos o tres generaciones de catalanes a sufrir.