La recolección y reciclaje de plásticos debe beneficiar a la comunidad, dotando un espacio de reciclaje en las playas, que garantice su transformación. La economía local debe ser impactada al dar valor a un material aprovechable, acciones que direccionen pedagogías de manejo y una correcta disposición.

¡Hola a todos y todas! Mi nombre es Sergio Pardo, tengo 34 años y lidero (Plástico precioso Uramba), un proceso para el reciclaje de plásticos recuperados de las playas de una zona protegida por conservación en el pacífico colombiano. En un problema para la vida, encontré una responsabilidad de emprendimiento.

Soy tripulante de barcos comerciales y capitán de embarcaciones tipo velero; he navegado para proyectos de conservación en fauna y flora, lo que me ha permitido conocer de cerca el impacto negativo en el mar, así como el osado manejo humano al material de importantes características como lo es el plástico. A raíz de estas experiencias, he construido un trabajo de campo que busca identificar, por medio de muestreos, respuestas reales a la problemática por acumulación de plásticos.

En 2019 nació el proyecto PLÁSTICO PRECIOSO URAMBA,  cuando trasladé mi domicilio a la comunidad de Ladrilleros, en el municipio de Buenaventura, Valle del Cauca. Esta comunidad pertenece al área protegida del Parque Nacional Natural Uramba. 

Llegué a la comunidad con la intención de desarrollar un modelo pedagógico a baja escala para el reciclaje mecánico de plásticos, proyecto de modelo abierto creado en Holanda y replicado a nivel mundial. Fue así como se construyó el taller de reciclaje para quienes viajan con propósito y visitan las playas donde reciclamos, recolectamos y transformamos con el respaldo de tres máquinas (trituradora/inyectora/compresora) para el proceso de transformación de los residuos sólidos plásticos.

Conocimiento para la educación y el progreso en comunidad

Por otra parte, en este centro de reciclaje hacemos actividades de ecoturismo con grupos locales y ecológicos de la comunidad, con el fin de rescatar el conocimiento ancestral y cultural. También, contamos con la biblioteca SUEÑO PACÍFICO, luego de que el grupo ecológico ECONATAL nos ofreciera un espacio en calidad de préstamo. Allí aportamos a los procesos escolares de nuestra comunidad y creamos espacios que incentiva destrezas y resalta talentos. 

Realizamos estrategias para la recolección de plásticos, como lo es “El Mercado del Plástico”, actividad que por medio de un “trueque ecológico” intercambia el plástico recolectado y clasificado con la población por elementos como vestimenta, útiles escolares, juguetes y demás artículos enviados en donaciones por interesados y amigos del proyecto. Incluso, los miércoles tenemos un “CineClub”, que lleva la pantalla grande a la comunidad con la venta de crispetas y limonada por un costo de 10 tapas plásticas.

En esta comunidad vi la importancia de conservar la vida, lugar de nacimiento para la ballena jorobada y un sinnúmero de diferentes especies que representan los océanos verdes del pacifico colombiano. Dentro de este territorio me di cuenta que, al no contar con ninguna presencia para el manejo de los residuos sólidos, se genera la ausencia de alternativas en comunidad para garantizar un proceso circular o de aprovechamiento al comercio y consumo de locales y turistas. La única opción hasta el momento era la incineración de plásticos, pero esto resulta nocivo para las personas.

Sin alternativas de aprovechamiento del plástico como un material para la conservación, el desarrollo y el incentivo de la economía local; aquí se vive una emergencia ambiental por la acumulación de plásticos en las playas.

Uno de nuestros limitantes dentro de este proyecto, además de la falta de conectividad a internet, es el financiamiento para crecer en maquinaria y equipos que garanticen una mayor producción de residuos reciclados directamente en el punto de afectación. En términos del plástico, muchos son los retos en los que encontramos distintas barreras producto de su difícil recolección, no solo por los riesgos de tener que ir a la playa a captar los residuos de todos, sino que lavar las partículas de arena y clasificar los envases por tipos de plásticos, es una tarea que nos limita.

Cabe resaltar que reciclamos únicamente los plásticos numero 2 polietileno de alta densidad y el numero 5 Polipropileno, por ser parte de los materiales seguros en el reciclaje mecánico (temperatura y presión). Ahora, estamos listos para conocer más técnicas y cubrir todos los tipos de plástico, garantizando, por supuesto, su correcto reciclaje. 

Nuestra gran meta es crear puntos de transformación de plásticos en zonas de afectación costera y oceánica que necesiten acciones urgentes, identificando problemáticas y posibles formas de manejo por medio de las pequeñas acciones a baja escala, que impacten positivamente en la vida, las poblaciones sin alternativas o ausentes de herramientas que faciliten el desarrollo y la convivencia humana en servicios básicos.

¡Luchemos para replicar estas iniciativas que ayudan al planeta y que impactan positivamente en la comunidad de las playas del pacifico colombiano como lo hace PLÁSTICO PRECIOSO URAMBA! 

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Conoce los procesos en comunidad siguiendo nuestras redes sociales: @plasticopreciosouramba y @bibliotecasuenopacifico